La Extremadura verde, una gran desconocida con muchos tesoros naturales que descubrir
Si me preguntas cuál es el lugar de Extremadura que más me gusta lo tengo clarísimo: el Valle del Jerte.
¡Sí, me has pillado!
Porque si miras en el mapa verás que justo ahí es donde se encuentra mi Cabezuela del Valle querido y mis campos de cerezos.
Pero, permíteme que te diga que son muchos los tesoros naturales que guardan estas tierras y que bien merece la pena una visita.
Zonas de baño con saltos de agua espectaculares, paisajes con una flora y una fauna magníficos, un valle que se viste de blanco en primavera...
Con todo esto seguro que te haces una idea; pero toma nota, que te cuento los detalles.
La Garganta de los Infiernos, la estrella del lugar
Es posiblemente el espacio natural más conocido y admirado de esta zona.
Se encuentra justo en el corazón del Valle del Jerte y es el desfiladero más conocido de toda la provincia de Cáceres.
Si lo buscas en el plano verás que está entre Jerte y Cabezuela del Valle y, si miras afinas un poco, verás que la Garganta de los Infiernos es un sitio que está tan lejos del mundanal ruido al que solo se puede llegar caminando.
Pero una vez que llegas… ¡te quedas maravillada!
Lo primero que te encuentras es una zona de pozas naturales, conocidas como Los Pilones, salpicadas de unos saltos de agua preciosos.
Si tu familia es de las que les divierten las actividades de aventura, te gustará saber que en estas aguas puedes practicar kayak, paddle surf, barranquismo o, si sois de actividades más tranquilas, una ruta de senderismo.
Es importante mencionar que tal es la relevancia ambiental de este lugar que está declarado y protegido como Reserva Natural.
Más lugares que no puedes perderte del Valle del Jerte
Como ya has visto, el Valle del Jerte es un paraíso natural que no solo tiene bancales de cerezos, sino que es un espacio donde el agua está muy presente.
Buena cuenta de ello lo dan las piscinas naturales del río Jerte
Como la de El Simón o La Pesquerona en Cabezuela del Valle; el Nogalón en Jerte; Los Pilones de la Garganta del los Infiernos...
Y así unas cuantas más.
Como te digo, todas ellas se encuentran en el recorrido del río Jerte y se encuentran perfectamente acondicionadas con su zona para que extiendas tu toalla y disfrutes de un día al aire libre de lo más a gusto.
¿A que no sabías que en el norte de Extremadura teníamos piscinas naturales y mucho menos que eran de tal belleza, verdad?
Y acuérdate que prácticamente todas cuentan con restaurantes y otras instalaciones para que eches el día bañándote o practicando vuestras actividades en la naturaleza preferidas.
No me olvido tampoco de los saltos de agua
Porque esa agua, tan presente en nuestra tierra, a veces se une a una orografía muy caprichosa dando como resultado unas cascadas magníficas.
Para mí, las más bonitas y espectaculares son dos; apúntatelas:
La cascada del Caozo y la garganta de Las Nogaledas.
En el Jerte tenemos también unos miradores impresionantes.
Uno de ellos (y el más bonito, si me lo permites) es el Mirador de la Memoria, en El Torno.
Se encuentra a casi 800 metros de altitud y es, literalmente, un balcón abierto a la montaña.
Además de las panorámicas preciosas que te regala de todo el Valle y su entorno, lo que hace tan especial ese mirador es el conjunto escultórico que aquí se encuentra y que rinde homenaje a las víctimas de la Guerra Civil y la dictadura.
¡Se me ponen los vellos de punta!
En el Puerto de Tornavacas está el mirador del mismo nombre, a 1.274 metros de altitud.
Desde ahí arriba puedes admirar también unas vistas bellísimas que muestran con toda claridad la riqueza natural del Valle del Jerte.
El Valle del Jerte: un lugar donde hay mucho que ver y que hacer
Ya te he contado buena parte de los encantos naturales que el norte de Extremadura ofrece a propios y visitantes en cualquier época del año.
Pero todavía no te había mencionado los pueblos que forman la comarca del Valle del Jerte (nada más y nada menos que 11).
Barrado, Rebollar, Tornavacas, Casas del Castañar...
Pero el que más me toca el corazón por razones obvias es Cabezuela del Valle, que es también la capital de la comarca.
Cabezuela es un lugar que tiene mucha historia que contar.
Y también de extraordinaria importancia, como prueba la declaración como Conjunto Artístico Histórico de su casco histórico en 1998.
Cabezuela del Valle tiene también una antigua judería, hoy conocida como barrio de Aldea, que mantiene prácticamente intacta sus calles estrechas y las inscripciones en los portones de aquella época.
Donde hoy se encuentra su iglesia se situaba, siglos atrás, su primitiva sinagoga.
Tampoco puedo dejar sin mencionar la calle principal, paralela al río Jerte y que se divide en 3 tramos: la calle del Puente, la Plaza y calle del Hondón.
Durante su recorrido puedes ver, aún hoy, edificios con escudos blasonados y balconadas de manera de épocas muy pero que muy antiguas.
Todo este patrimonio cultural y la belleza natural del Valle del Jerte puedes vivirlo de una manera más auténtica gracias a un buen número de hoteles y casas rurales con unos equipamientos y atención excelente.
Restaurantes donde degustar la auténtica comida extremeña; nuestras acogedoras gentes…
Y un montón de actividades en la naturaleza que puedes practicar.
Rutas de senderismo, rutas en bici de montaña, barranquismo, kayak, paddle surf…
Ya lo ves, ¡en el norte de Extremadura hay mucho que ver pero también que hacer!
Sin olvidarnos, por supuesto, del…
Valle del Jerte, el corazón blanco y floreado de Extremadura
La primavera es la época del año en la que mi querido Valle del Jerte se viste de blanco para envolvernos en un entorno espectacular.
La floración del cerezo, a la que sigue la época de la recolección, es todo un acontecimiento anual que disfrutamos mucho los que somos de aquí, pero también los cientos de visitantes que vienen cada año.
Las fiestas populares, el Museo de la Cereza o las rutas por los cerezos en flor son algunas de las actividades que te puedes encontrar si visitas el Jerte durante estos días.
Pero no solo esas, porque este año puedes venir a visitar los campos de cerezos en flor de La Patrona.
Sí, porque este año te abro las puertas de mi casa para que veas con tus propios ojos el lugar desde donde cultivamos con mimo las cerezas que más tarde te llevamos a casa, directamente del árbol.
Una oportunidad para hacer eso que llaman desvirtualizar y que nos conozcamos cara a cara, sin pantallas de por medio.
Y pasar una jornada en mis campos de cerezos en flor en la que no van a faltar la gastronomía, la cultura, la artesanía ni, por supuesto, alguna sorpresa que otra.
Aquí tienes los detalles para venirte a visitar los cerezos en flor de La Patrona.
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A estas alturas seguro que te quedan pocas dudas de que el norte de Cáceres es tu próximo destino de turismo rural.
Para un puente, una escapada de fin de semana, unas vacaciones de desconexión…
Sea como sea, ten muy presente que la Extremadura verde es un destino que merece mucho la pena en cualquier época del año 😉.
Créditos de las imágenes:
- Turismo Valle del Jerte